16 de marzo de 2007

MITOS ECONÓMICOS: ¿EL BANCO MUNDIAL CONTRA LAS TABACALERAS?


El Banco Mundial en su informe Curbing the Epidemia, nos descubre un valioso arsenal de argumentaciones económicas sobre el impacto de las políticas de control del tabaco en la economía de los países y en la pérdida de empleo en los sectores agrícola y manufacturero.

En la Web de la Unidad de Pediatría Ambiental de Valencia, encontramos una interesante recopilación de los MITOS ECONOMICOS del tabaco, que invitamos a estudiar:

MITO: AUMENTARÁ EL DESEMPLEO EN LA AGRICULTURA E INDUSTRIA MANUFACTURERA.- Las previsiones más optimistas indican que se incrementará el consumo de productos del tabaco en los próximos tres decenios. La OMS estima que de seguir la tendencia actual, el número de fumadores pasará de 1.100 a 1.600 millones en el año 2025 (debido en parte al incremento de la población mundial), a pesar de que ese hábito se reduzca en algunos países. Aunque una disminución del consumo reducirá los empleos agrícolas en las zonas tabacaleras, dicha pérdida será paulatina a lo largo de varias décadas, por lo que no será inmediata. Por ello, los gobiernos tendrán amplia oportunidad de planificar una transición gradual y ordenada.

MITO: UNA CARGA IMPOSITIVA ALTA PARA LOS PRODUCTOS DEL TABACO REDUCIRÁ INGRESOS PÚBLICOS.- El incremento del precio en los cigarrillos es un método particularmente efectivo para reducir su demanda pues un costo elevado induce a los fumadores a abandonar el hábito y anima a otros a no iniciarlo (en particular la gente joven y la de escasos recursos). Incrementar en un 10% el precio de una cajetilla de cigarrillos reduce la demanda aproximadamente un 4% en los países ricos y un 8% en los países con menos recursos, salvando millones de vidas. Aún así, de acuerdo con las estimaciones del Banco Mundial, las ganancias se incrementarán aproximadamente un 7%; lo cual se deberá a que la reducción en el consumo de cigarrillos será menor en comparación con el incremento del precio. Además, parte del dinero que ahorren los ex fumadores lo gastarán en otros bienes y servicios con impuestos incluidos. El incremento en el precio de los cigarrillos reduce el consumo de forma destacada entre los más jóvenes.

MITO: GRAVAR LOS CIGARRILLOS CON UNA TASA IMPOSITIVA ALTA ACARREARÁ DESVENTAJAS PARA LOS POBRES.- Las empresas tabacaleras argumentan que no debería incrementarse el precio para no perjudicar a los pobres. Sin embargo, los estudios muestran que las poblaciones con bajos ingresos realmente ya están más perjudicadas por el tabaquismo, que impone costos inmensos en términos de morbilidad, mortalidad, gastos de atención médica y pérdida de salario. Asimismo, estas personas son las primeras beneficiadas con el incremento del precio, pues es más probable que fumen menos o incluso que lo abandonen totalmente.El beneficio para los pobres puede ser incluso mayor si el ingreso adicional proveniente del pago de impuestos se utiliza para financiar programas a favor de los más desprotegidos. En China, por ejemplo, estimaciones conservadoras sugieren que un 10% de incremento en el impuesto a cigarrillos podría reducir el consumo en un 5%, incrementar el ingreso un 5%, y obtener recursos suficientes para financiar servicios básicos de salud para un tercio de los 100 millones de ciudadanos pobres en dicho país.

La apropiación y el manejo político de estos argumentos económicos, respaldados por el estudio del Banco Mundial, institución que define las políticas estructurales de los gobiernos del tercer mundo, es fundamental para la labor de abogacía de las organizaciones que en el mundo trabajan por el control del tabaco.

No olvidemos que la industria del tabaco acude siempre a movilizar a trabajadores y pequeños cultivadores, para oponerse a las políticas públicas de control del tabaco, en una clara estrategia de manipulación.
.
+INFO: PEHSU.ORG